Tal burocratización del desastre en marcha no sólo necesita impedir la autogestión sino prepararse para apaciguar la ola de conflictos generalizados, revueltas e insurrecciones incontroladas que se avecinan. Pareciera que hay un plan burocrático de gestión sostenible de la debacle industrial. Aunque la percepción de los de abajo sea la de que, ante los recientes acontecimientos la Alta Dirección mundial no sabe por dónde avanzar, es evidente que hace falta una estrategia tramposa de greenwashing adoptada por los gestores para afrontar la recta final del capitalismo fosilista.
Source: aporrea.orgPublished on 2021-07-11